domingo, noviembre 04, 2007

en silencio...

Llevo ya 16 horas sin hablar. Para alguien como yo, es mucho. Y lo triste es que ni si quiera hay apuestas de por medio. Sin duda, hubiera ganado.

La soledad me gusta cuando la escojo, cuando tengo la opción. Yo la invito, la busco. La soledad no me gusta cuando no me queda de otra, cuando ella me escoge a mi. A veces se queda por horas, otras veces por días. Y me cala, me enfada y normalmente no me cae muy bien.

¿Cómo hago para llevarme bien con ella? Es que, parece que verdaderamente, no me queda de otra...

Una de mis canciones favoritas...
http://youtube.com/watch?v=9hUy9ePyo6Q

2 comentarios:

  1. Y es más dolorosa cuando te resistes a ella e, implacable, te atraviesa con su espada fría.
    Cuanto más te resistes a esa situación, más desesperante y frustrante resulta, con fas fuerza te golpea.
    A mi me pasa que cuando estoy acompañado, en un momento dulce, de esos para guardar en el recuerdo, y comienzas a darte cuenta que entra en su finalización, al mismo tiempo la agustia se apodera de mi, por no poder hacer nada en contra, por intentar aferrarme a esos instantes. La impotencia y la desesperación me embargan.

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  2. Exacto... casi siempre, cuando estoy con alguien y la paso bien, no quiero que se acabe, y me angustia pensar que tengo que regresar sola, a mi casa sola.

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